La juventud es la etapa de la vida (entre los 15 y los 24 años) en la que dejamos de depender de otras personas y tomamos las riendas de nuestro propio futuro. Si la transición sale bien, todos se benefician. Sin embargo, una transición fallida puede desembocar en una situación de pobreza que se prolongue de por vida, y en un impacto negativo en la sociedad y la economía.

Dado que las necesidades de los jóvenes del medio rural son especialmente apremiantes, el presente informe se centra en ellos, que representan alrededor de la mitad del total de la población joven de las zonas rurales en los países en desarrollo.

De los 1 200 millones de jóvenes que hay en el mundo, cerca de 1 000 millones viven en países en desarrollo. Esta “masa” de la población joven es una consecuencia de la lenta transición demográfica en esos países, en los que se observan espectaculares descensos de las tasas de mortalidad que no siempre se acompañan con unas tasas de natalidad significativamente inferiores. ¿Qué pueden hacer los encargados de la formulación de políticas para ayudar a los jóvenes a desarrollar todo su potencial?

Al mismo tiempo, una ola de cambio tecnológico de carácter transformador rápida y sin precedentes se está extendiendo por el mundo. Esta circunstancia ofrece un abanico de nuevas oportunidades al tiempo que interrumpe algunas de las vías de desarrollo rural más tradicionales.

Como consecuencia de la revolución digital, se ha experimentado un enorme incremento del acceso a la información y los medios de comunicación de masas, lo que a su vez ha ampliado los horizontes de los jóvenes del medio rural, cuyos deseos de aumentar sus ingresos han aumentado, y tienen mayor influencia en la toma decisiones. ¿Cómo podemos garantizar que las oportunidades económicas y sociales mantienen el mismo ritmo que sus aspiraciones?

En África Subsahariana, la suma de una tasa de natalidad alta y una situación de pobreza generalizada equivale a un elevado y creciente número de jóvenes que se encuentran en situación de pobreza y se concentran en zonas rurales con escasas posibilidades de empleo. Este hecho supone un problema especial. ¿Cuál es la mejor manera para estos países, entre otros, de invertir en el futuro de sus jóvenes?